desde el inicio de la crisis, en 2008, la economía sumergida se ha incrementado en españa en cerca de 60.000 millones de euros para situarse, en 2012, en el 24,6% del pib del país. detrás de estas escalofriantes cifras se encuentra en gran medida la resaca del ladrillo tras los años de bonanza de 2004 a 2007
estos datos, recogidos en un informe presentado por los técnicos del ministerio de hacienda (gestha) y elaborado por el profesor jordi sardá de la universitat rovira y virgili de cataluña, muestran una economía sumergida que en 2012 alcanzó los 253.135 millones de euros, un 0,9% más que en 2011
“la caída en picado de la construcción durante los años de la crisis ha provocado que deje de ser importante para el blanqueo, ahora la variable es el paro”, tal y como detalla a idealista news el profesor sardá tras la presentación del informe
según avanza el estudio, el volumen de actividad en negro aumentó de media unos 15.000 millones de euros anuales desde el inicio de la crisis en 2008, cuando la tasa de economía sumergida se situó en el 17,8% del pib del país, y desde entonces no ha parado de crecer. de hecho desde ese año hasta 2012 su incremento ha sido de casi el 7%
además, a factores como el boom inmobiliario, el paro, la corrupción o el “grave problema de moralidad en españa” durante este periodo se suma el masivo uso de billetes de 500 euros en nuestro país, que representa el 73,7% del efectivo en circulación y el 14% del valor de todos los billetes de 500 que se manejan en la zona euro, y que son el instrumento preferido para blanquear dinero
por comunidades, la economía sumergida la lideraron extremadura (31,1%), andalucía (29,2%) y castilla la mancha (29,1%), las más castigadas por el colapso inmobiliario o el desempleo, mientras que las que menos blanquearon fueron aragón (22,3%), cantabria 22%) y madrid (17,3%), un caso particular que llama la atención por su bajo índice y en donde se sospecha que se elude el pago de impuestos a través de fórmulas sofisticadas de “ingeniería fiscal” puestas en marcha por grandes empresas y fortunas
para resolver este problema de blanqueo de capitales, los técnicos de gestha proponen una serie de medidas:
- conocer la dimensión del problema por sectores con informes oficiales realizados por expertos independientes
- realizar campañas de concienciación al estilo de las elaboradas por la dgt sobre seguridad vial para alertar sobre los efectos del fraude
- promover y velar por el buen funcionamiento del sistema y que se paguen impuestos en relación a la capacidad económica de cada uno
- ampliar y optimizar los medios y recursos de la agencia tributaria
- llevar a cabo una lucha realista contra el fraude, imponiendo objetivos realizables y asumiendo la legalización de actividades aunque dejen de ser rentables
- mejorar la coordinación entre agencias y crear una base de datos tributaria única
- mayor control del gasto público e intensificar las auditorías operativas
- realizar cambios impositivos para reducir los paraísos fiscales o la dualidad de rentas
- limitar el uso de efectivo a un máximo, por ejemplo, de 1.000 euros por operación